Pasar al contenido principal

[OPINIÓN] Mi granito de arena en estos tiempos difíciles... Por Manolo Valle Barragán

Quiero aportar con estas letras un granito de arena, y que vayan dedicadas a toda esa gente que saque varios minutos para leerlas, pero más especialmente van dedicadas a todos los carnavaleros y carnavaleras a lo largo y ancho de la geografía andaluza, pero estas letras hoy más que nunca se quedan aquí en mi pueblo, en esta tierra de la blanca CAL, y donde el mágico toque de una guitarra es la encargada de poner música cada febrero y mediante la pluma de nuestros poeta, a un bello pasodoble hecho poesía, que en las voces de sus comparsistas y chirigoteros llenarán cada rincón y cada plaza de este Morón que se vuelve carnavalero por febrero.

Este año nos quedamos huérfanos de coplas, pero en un día no muy lejano, todo pasará, y entre cuplés y cuplés recordaremos lo incómodo que era el llevar esas molestas mascarillas, que para más de uno es un calvario, y recordaremos con el pasodoble más bonito compuesto en el mágico taller de las palabras, a los que se nos han ido, víctima del covid, a esos sanitarios y sanitarias responsables y siempre en primera línea luchando por salir de esta grave crisis sanitaria.

El carnaval este año se silencia, para volver a vestir su mejor tipo, en un futuro no muy lejano, donde volverán a escucharse esas coplas que durante 4 meses se fragua en los locales de ensayos, volveremos a tomar las calles y plazas de este Morón nuestro, donde su futuro pregonero, nos deleitará con un pregón que este maldito virus nos prohíbe en este año del 21.

Maldito virus que nos prohíbe ese sábado de bullas eternas por el centro, donde nuestra gente se tira a la calle, deseosa de vivir su carnaval y donde la amistad se pone 2 coloretes y nos regala ese pasacalles de millones de colores, con nuestra gente disfrazada.

Las coplas enmudecen, las guitarras en compañía de miles de bombos y cajas por primera vez en muchos sitios dejan de sonar. Los pasodobles se quedan en las memorias de sus autores y dejan huérfanos a sus comparsas y chirigotas, y callan las voces de los pregones lanzados al aire por sus postulantes, encargados cada año de vender sus coplas, en ese libreto que este año se queda en blanco, donde sus hojas esperaran impaciente un nuevo año, para ser de nuevo llenas de nuevas letras carnavalescas.

Mucho ánimo a todos los carnavaleros y carnavaleras, tenemos por qué así toca en estos tiempos ser positivos, ya pronto volverán de nuevo a resurgir como el ave fénix de sus cenizas nuestros queridos carnavales, en breve continuaremos dándonos cariño a la sombra de un cuplé y un pasodoble, a podernos abrazar y tomar esa copa que ahora no nos permite las normativas necesarias a seguir para vencer entre todos a este virus malnacido.

Para que cobren de nuevo vida nuestros locales de ensayos, que vuelva la alegría a esos eternos talleres de costura, donde nuestras costureras obren como por arte de magia el milagro de dar vida a miles de tipos carnavalesco, para tomar nuestras calles y vivir nuestra fiesta grande.

Pero ahora solo queda eso, esperar a un nuevo año, recordar viejas coplas, las que aún perdura en la mente del buen aficionado, hago mío el himno de nuestros queridos carnavales para acabar comentando Y QUE PARA EL AÑO QUE VIENE EN VEZ DE UNA COMPARSA Y UNA CHIRIGOTA HAYA UNA HARTÁ.

Y PERMITIDME QUE ACABE ACORDANDOME DE ESE ETERNO POETA GADITANO, MI CAPITÁN VENENO PARA REMATAR ESTAS LETRAS COMENTANDO, CREO EN TI OH TODOPODEROSO CARNAVAL MORONERO, PORQUE CREO EN LA VIDA ETERNA DE MIS CARNAVALES.